PUJOL TAMPOCO SE FIA.-

"ENGAÑÓ A TODOS LOS CATALANES". PUJOL, SOBRE ZAPATERO: "NO INSPIRA CONFIANZA".
El ex presidente de la Generalidad de Cataluña, Jordi Pujol, no tiene un juicio positivo del presidente del Gobierno, del que dice que "no inspira confianza". En una entrevista concedida al diario ABC, el antiguo jefe del Ejecutivo catalán ha señalado que Zapatero "primero engañó a Maragall, luego engañó a todos los catalanes al prometer que aceptaría el nuevo Estatut y luego engañó al tripartito". Sobre Cataluña, también ha lamentado una falta de autoestima: "En el ámbito público hemos perdido peso". El ex presidente de la Generalidad de Cataluña, Jordi Pujol, sigue día a día la evolución de la política regional y nacional, en la que cree que Cataluña ha "perdido peso", quizá porque entiende que el actual presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, les ha engañado.
En una entrevista que publica este domingo el diario ABC, Pujol no valora de forma muy positiva la labor de Zapatero al frente del Gobierno: "No tengo un juicio positivo. No inspira confianza". El ex jefe del Ejecutivo catalán no cree que haya engañado a CIU, más bien a todos los catalanes: "Yo me siento engañado como catalán. Zapatero primero engañó a Pascual Maragall; luego engañó a todos los catalanes al prometer que aceptaría el nuevo Estatuto tal cual saliera del Parlamento de Cataluña; luego engañó al tripartito".
FUERA DE JUEGO.
Al respecto del Estatuto catalán, Pujol ve muy claras unas segundas intenciones de los que lo pusieron en marcha: "Seguramente no se daban las condiciones para una reforma estatutaria profunda. En realidad, el objetivo de la izquierda no era el Estatuto sino crear el tripartito dejando a CiU fuera de juego".
Además, apunta que Zapatero se mostró a favor porque "pensaba que iba a perder las elecciones y se puso delante de la manifestación". En este sentido, el presidente de la Generalidad recalcó que la estrategia socialista con el Estatuto iba a ser "crear tensión, enfrentarse con Madrid durante cuatro años", pero no contaba con que el PP perdiera las elecciones.
Pujol explica que el papel de CiU en la política nacional "ha perdido peso" –pese a que siempre han buscado "favorecer la estabilidad, la gobernabilidad y la continuidad"– básicamente porque "no se nos necesita, porque no tenemos capacidad de influir con peso y porque no servimos para la bronca", añadió el ex presidente catalán. En este sentido, quiso agregar que siempre fue "partidario de intervenir en la política española. CiU siempre ha practicado el intervencionismo en España". Recordó que así fue con el PSOE, el PP y antes con la UCD.
ECONOMÍA Y ETA.
Sobre la marcha de la Economía, Pujol lamentó igualmente "una cierta crisis de inversión extranjera" que achacó a "la crisis de los organismos reguladores. La imagen exterior de España está siendo afectada".
Sobre ETA y el País Vasco, Pujol no quiso pronunciarse: "Asumo lo que diga el PNV", pero no tiene muy claro que ni a Rodríguez Zapatero ni a Rajoy les interese apaciguar. Aun así, se mostró partidario de "que se deje atrás la crispación".
Por otra parte, criticó la clase política actual – sobre todo al compararla con la de la Transición – y, a pesar de señalar que son distintas, apuntó que "la política actual es poco coherente y de bajo nivel" y de permitió aconsejar: "Se debe ir con cuidado de no caer en los defectos de la vida pública italiana, con todas sus cualidades y logros".