LE REPROCHAN QUE OCULTARA INFORMACIÓN Y PRUEBAS. LA JEFA DEL LABORATORIO DE LOS TEDAX DICE AHORA QUE SÍ PUDO DETERMINAR COMPONENTES DE LOS EXPLOSIVOS EL 11-M. UNA PERITO ALIADA DEL FISCAL, QUE HUBO DE SER REPRENDIDO POR NO DEJAR HABLAR A LOS OTROS PERITOS.
La versión oficial había silenciado hasta ahora todo lo relacionado con los primeros análisis para determinar qué explotó en los trenes. Más de tres años después, la jefa del laboratorio de los Tedax ha explicado que detectó nitroglicol y nitrato amónico. Los peritos encargados del informe ordenado por el tribunal, presentes también en la pericia de este lunes, le han reprochado que les ocultara esta información. También, que no hayan tenido acceso a esas supuestas muestras de las que ha hablado la experta y que, según se ha desvelado ahora, no se lavaron con agua y acetona. Sobre la teoría de la contaminación, a la que se ha sumado esta química, algunos peritos han argumentado con pruebas de laboratorio que es imposible de sostener.
Casi quince días después de que se conociera el informe pericial que tuvo que ordenar Gómez Bermúdez para intentar aclarar qué explotó el 11-M, los ocho peritos encargados del análisis comparecieron ante el tribunal. Lo hicieron al mismo tiempo que la jefa del laboratorio de los Tedax que redactó los primeros análisis el mismo día de la masacre. Hasta ahora la versión oficial sostenía que en esos momentos iniciales no se pudo determinar la composición de los explosivos. Ante el tribunal, la perito dijo este lunes que detectó nitrato amónico y nitroglicol. Acto seguido, los peritos le echaron en cara que ocultara esa información. Los mismos peritos que transcurridos tres años de la masacre detectaron nitroglicerina y DNT, dos componentes que no forman parte de la Goma 2 ECO y sí del Titadyn o la Goma 2 EC. La experta de los Tedax dio por válida la teoría de la contaminación y fue entonces cuando llegaron las matizaciones de los peritos. Antes otros peritos de la Policía confirmaron que la alarma del teléfono móvil hallado en la mochila de Vallecas se pierde al quitar la batería. Lo que no explicaron fue cómo se mantuvo esa hora después de que el teléfono fuera desmontado para hacerle las fotografías que difundió la cadena norteamericana ABC.
LA PERITO SE APUNTA A LA TEORÍA DE LA CONTAMINACIÓN.
Pero lo más importante de la sesión llegó tras el receso de media mañana. Comenzó la pericia sobre los informes de explosivos. Para ello se sentaron frente al tribunal los ocho peritos que, por orden de Gómez Bermúdez, analizaron tres años después los explosivos que estallaron el 11-M. También comparecieron al mismo tiempo los peritos que tras la masacre analizaron el teléfono de la mochila de Vallecas y, la más esperada, la jefa del laboratorio de los Tedax que hizo el primer análisis de los explosivos.
Hasta su aparición, había sido Olga Sánchez la encargada de hacer las preguntas en representación de la Fiscalía. Sin embargo, el fiscal jefe le tomó el relevo y se encargó del interrogatorio. Con una manifiesta intención, Javier Zaragoza se detuvo en los años de experiencia de esta experta química y en los "miles" de informes que ha firmado a lo largo de su carrera. Lo capcioso de sus intervenciones quedó de manifiesto cuando preguntó si en esos análisis, a requerimiento judicial, se han cuestionado sus resultados alguna vez. Gómez Bermúdez se vio obligado a intervenir: "Que no se cuestionen no quiere decir que sean correctos siempre".
Refugiándose en cuestiones científicas complicadas de entender en la sala, explicó que en sus primeros análisis detectó en las muestras de explosivos nitroglicol y nitrato amónico. Llegó a esa conclusión tras realizar varias pruebas que requerían "limpiar las muestras con agua y acetona". Fue entonces cuando desveló que reservó algunos restos sin tratar con acetona. Explicó a sus superiores que se trataba de dinamita. Empleó este término genérico porque, según dijo este lunes, "después de una explosión nunca se puede determinar la marca o el nombre comercial de un explosivo".
A continuación se apuntó a la teoría de la contaminación para justificar que ahora haya aparecido DNT y nitroglicerina, dos componentes que no están en la Goma 2 Eco pero sí en el Titadyn y la Goma 2 Ec.
LOS PERITOS DESMONTAN SUS ARGUMENTOS.
"Todas las muestras pudieron contaminarse", dijo la jefa del laboratorio de los Tedax al fiscal jefe de la Audiencia. Cuando le preguntó Zaragoza si "por contaminación ambiental" replicó "puede ser". Algunos de los ocho peritos del último informe encargado por Gómez Bermúdez pidieron intervenir en este momento. Explicaron que era imposible ese tipo de contaminación porque la atmósfera tendría que estar completamente cargada de este componente. Además, esgrimieron pruebas realizadas para ver si podía producirse esa contaminación. No hubo un solo caso.
Otro de los peritos intervino también para reprochar a los Tedax que pese a haber solicitado información sobre los análisis iniciales se la hubieran negado.
No han tenido acceso a los informes sobre explosivos que se hicieron el mismo 11-M. "Ahora se nos descubre el secreto de que el contenido genérico era nitrato amónico y nitroglicol. Eso no es un misterio, en nuestro informe figura en primer lugar. Entonces, ¿por qué no se nos ha informado antes de llegar al juicio?", se preguntó uno de los peritos de parte.
LA CONTAMINACIÓN, CADA VEZ MÁS DIFÍCIL DE DEMOSTRAR. BERMÚDEZ EXIGE A LA JEFA DE LABORATORIO DE LOS TEDAX QUE APORTE EN EL JUZGADO TODOS LOS INFORMES QUE REALIZÓ EL 11 - M.
Las preguntas han estado dirigidas hacia la jefa de laboratorio de los Tedax, que fue la primera en recibir las muestras el mismo día de los atentados y la responsable de su almacenaje. Explicó el modo en que estas pruebas han estado guardadas: en un armario, a temperatura estable y en cajas, bolsas y sobres. Precisamente para evitar cualquier tipo de contaminación. También afirmó que normalmente no se envían a la Policía Científica muestras de explosivos para su análisis. Afirmación que quedó en entredicho con un informe exhibido por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M. Bermúdez no quiso que llegara el receso sin exigirle a la perito que entregue todas las notas que realizó el día de los atentados en el juzgado
La jefa de laboratorio de los Tedax durante el 11-M ha tenido que contestar a multitud de cuestiones relacionadas con su actuación el día de la masacre. La química, a preguntas de la AVT, ha explicado que nunca guardan el agua y el acetona donde se lavaron "todas las muestras de los explosivos". Aunque ha añadido que nunca se las han pedido.
Otra de las cuestiones en controversia ha sido el lugar donde estas muestras han estado almacenadas durante años. La perito era la responsable de su almacenaje, por lo que podía contestar ampliamente. En un primer momento ha señalado que las guardó en el almacén "donde normalmente se guardan los explosivos". Es un almacén "de muestras judiciales". La perito contestó que "evidentemente" no se pueden tener miles de muestras en habitáculos o departamentos estanco y asépticos guardadas durante 15 o 20 años. Bermúdez no permitió esa explicación. "No estamos hablando de 20 años, señora". A continuación reconoció que han estado en una temperatura y humedad estables.
Es más, se metieron en un armario sólo las muestras relativas al 11-M. Éstas a su vez estaban metidas en bolsas encintadas dentro de unos sobres que a su vez se encontraban dentro de otras bolsas de plástico contenidas en una caja de cartón envuelta por una bolsa. La perito contestó además que nunca en el laboratorio de los Tedax se habían dado casos de contaminación por este sistema.
BUSCANDO COMO SEA LA CONTAMINACIÓN.
Buena parte de la sesión de tarde se caracterizó por las discusiones entre los peritos, las contradicciones de la jefa del laboratorio de los TEDAX y el empeño del fiscal Zaragoza en avalar de cualquier forma la tesis de la contaminación. Pese a que la terminología empleada por los expertos escapa al común de los mortales sí pudo intuirse que el trabajo diario de los peritos ha debido ser tenso. A cada afirmación llegaba una discrepancia. Lo que uno afirmaba el otro lo negaba. ¿Qué quedo claro? Desde luego que la fiscal no tenía un solo indicio para hacer aquella afirmación de "es goma 2 ECO y vale ya".
Hasta bien avanzada la sesión no hubo posibilidad de saber si todas las muestras remitidas a los peritos habían sido lavadas con agua y acetona (práctica disolvente necesaria en ocasiones para extraer sustancias de una muestra). De hecho, y para mayor confusión, se manejaron las dos posibilidades: Todas las muestras se lavaron con agua y acetona pero, en algunos casos, no se lavó toda la muestra. Aquí es donde se debatió fundamentalmente sobre dos muestras: la M-1 (polvo procedente del extintor que había en un vagón de la estación de El Pozo) y la 6-12-A (trozo de tela procedente de una bolsa). Aunque pueda resultar complicado, sin una sólida formación científica, seguir los argumentos de los peritos conviene reseñar algunos de los momentos en los que salió a la luz la tesis de la aparición de sustancias por mera contaminación, por cierto, no definida.
Uno de los peritos pidió la palabra para decir que en el polvo de extintor aparecieron sustancias dignas de mención. Sometida a prueba con difenilamida, mostraba un precipitado propio de los nitratos, y eso – explicó – es una potencial presencia de explosivos. Pero la jefa de laboratorio discrepó: esa no es una prueba específica de nitratos. Pueden salir "miles de cosas más". Para el perito, entre esas miles de cosas también está la presencia de explosivo: "Merecía la pena – lamentó – haber seguido esa línea de investigación".
Tras varias intervenciones de los peritos que han hecho las pruebas sobre la capacidad de absorción del polvo de extintor y si esa capacidad vale tanto para demostrar qué tipo de explosivo había como para inferir que se contaminaron, se llegó a decir que en 2004 aquella muestra no tenía componentes explosivos salvo los nitratos que pudieran ser propios del extintor. El juez Javier Gómez Bermúdez comenzó a enfadarse: ¿Es que el laboratorio está sucio, es malo, está desordenado, qué explicación tiene entonces?
A todo esto, Javier Zaragoza aprovechó cualquier oportunidad para incidir en la contaminación por peregrina que esta fuera. Llegó a preguntar ¿si la goma 2 ECO está unida a goma 2 EC podría salir DNT?
LAVADO DE MUESTRAS: SÍ PERO NO.
Uno de los peritos apuntó que cuando recibieron las muestras de los focos "todas están lavadas" con agua y acetona como, por otra parte, hicieron constar en uno de los informes preliminares. Pero el fiscal insistió en que la jefa de laboratorio ya había dicho que no todas estaban lavadas. Al final resultó que sí, que todas estaban lavadas pero no en su totalidad. Y, ¿dónde están las demás muestras?, preguntó Bermúdez. Enviadas dice la química. Un perito trató de explicar algo que volvió a servir al fiscal y que el propio Bermúdez asumió como posible punto de encuentro: esta vez, el protagonista era el sulfato amónico aparecido en las muestras 6-12-A y 6-12-C. Dicen que si se hubiera lavado con agua habría desaparecido ese compuesto. Se quería pues, demostrar que no todas fueron lavadas. Pero la clave está en que siendo eso cierto nadie quiso reparar en que en esas muestras apareció DNT, componente incompatible con la Goma 2 ECO. ¿Contaminación? Bermúdez seguía preguntando de qué forma.
Mientras Zaragoza seguía arrimando el ascua a su sardina un perito se quejó de que, digan lo que digan con el sulfato amónico, "se nos dijo por escrito y hemos solicitado entrevistas para que se nos aclarara lo del agua y acetona. No se nos han aportado las aguas de lavado y la acetona". Pero, ¿existen? Pues no.
La versión oficial había silenciado hasta ahora todo lo relacionado con los primeros análisis para determinar qué explotó en los trenes. Más de tres años después, la jefa del laboratorio de los Tedax ha explicado que detectó nitroglicol y nitrato amónico. Los peritos encargados del informe ordenado por el tribunal, presentes también en la pericia de este lunes, le han reprochado que les ocultara esta información. También, que no hayan tenido acceso a esas supuestas muestras de las que ha hablado la experta y que, según se ha desvelado ahora, no se lavaron con agua y acetona. Sobre la teoría de la contaminación, a la que se ha sumado esta química, algunos peritos han argumentado con pruebas de laboratorio que es imposible de sostener.
Casi quince días después de que se conociera el informe pericial que tuvo que ordenar Gómez Bermúdez para intentar aclarar qué explotó el 11-M, los ocho peritos encargados del análisis comparecieron ante el tribunal. Lo hicieron al mismo tiempo que la jefa del laboratorio de los Tedax que redactó los primeros análisis el mismo día de la masacre. Hasta ahora la versión oficial sostenía que en esos momentos iniciales no se pudo determinar la composición de los explosivos. Ante el tribunal, la perito dijo este lunes que detectó nitrato amónico y nitroglicol. Acto seguido, los peritos le echaron en cara que ocultara esa información. Los mismos peritos que transcurridos tres años de la masacre detectaron nitroglicerina y DNT, dos componentes que no forman parte de la Goma 2 ECO y sí del Titadyn o la Goma 2 EC. La experta de los Tedax dio por válida la teoría de la contaminación y fue entonces cuando llegaron las matizaciones de los peritos. Antes otros peritos de la Policía confirmaron que la alarma del teléfono móvil hallado en la mochila de Vallecas se pierde al quitar la batería. Lo que no explicaron fue cómo se mantuvo esa hora después de que el teléfono fuera desmontado para hacerle las fotografías que difundió la cadena norteamericana ABC.
LA PERITO SE APUNTA A LA TEORÍA DE LA CONTAMINACIÓN.
Pero lo más importante de la sesión llegó tras el receso de media mañana. Comenzó la pericia sobre los informes de explosivos. Para ello se sentaron frente al tribunal los ocho peritos que, por orden de Gómez Bermúdez, analizaron tres años después los explosivos que estallaron el 11-M. También comparecieron al mismo tiempo los peritos que tras la masacre analizaron el teléfono de la mochila de Vallecas y, la más esperada, la jefa del laboratorio de los Tedax que hizo el primer análisis de los explosivos.
Hasta su aparición, había sido Olga Sánchez la encargada de hacer las preguntas en representación de la Fiscalía. Sin embargo, el fiscal jefe le tomó el relevo y se encargó del interrogatorio. Con una manifiesta intención, Javier Zaragoza se detuvo en los años de experiencia de esta experta química y en los "miles" de informes que ha firmado a lo largo de su carrera. Lo capcioso de sus intervenciones quedó de manifiesto cuando preguntó si en esos análisis, a requerimiento judicial, se han cuestionado sus resultados alguna vez. Gómez Bermúdez se vio obligado a intervenir: "Que no se cuestionen no quiere decir que sean correctos siempre".
Refugiándose en cuestiones científicas complicadas de entender en la sala, explicó que en sus primeros análisis detectó en las muestras de explosivos nitroglicol y nitrato amónico. Llegó a esa conclusión tras realizar varias pruebas que requerían "limpiar las muestras con agua y acetona". Fue entonces cuando desveló que reservó algunos restos sin tratar con acetona. Explicó a sus superiores que se trataba de dinamita. Empleó este término genérico porque, según dijo este lunes, "después de una explosión nunca se puede determinar la marca o el nombre comercial de un explosivo".
A continuación se apuntó a la teoría de la contaminación para justificar que ahora haya aparecido DNT y nitroglicerina, dos componentes que no están en la Goma 2 Eco pero sí en el Titadyn y la Goma 2 Ec.
LOS PERITOS DESMONTAN SUS ARGUMENTOS.
"Todas las muestras pudieron contaminarse", dijo la jefa del laboratorio de los Tedax al fiscal jefe de la Audiencia. Cuando le preguntó Zaragoza si "por contaminación ambiental" replicó "puede ser". Algunos de los ocho peritos del último informe encargado por Gómez Bermúdez pidieron intervenir en este momento. Explicaron que era imposible ese tipo de contaminación porque la atmósfera tendría que estar completamente cargada de este componente. Además, esgrimieron pruebas realizadas para ver si podía producirse esa contaminación. No hubo un solo caso.
Otro de los peritos intervino también para reprochar a los Tedax que pese a haber solicitado información sobre los análisis iniciales se la hubieran negado.
No han tenido acceso a los informes sobre explosivos que se hicieron el mismo 11-M. "Ahora se nos descubre el secreto de que el contenido genérico era nitrato amónico y nitroglicol. Eso no es un misterio, en nuestro informe figura en primer lugar. Entonces, ¿por qué no se nos ha informado antes de llegar al juicio?", se preguntó uno de los peritos de parte.
LA CONTAMINACIÓN, CADA VEZ MÁS DIFÍCIL DE DEMOSTRAR. BERMÚDEZ EXIGE A LA JEFA DE LABORATORIO DE LOS TEDAX QUE APORTE EN EL JUZGADO TODOS LOS INFORMES QUE REALIZÓ EL 11 - M.
Las preguntas han estado dirigidas hacia la jefa de laboratorio de los Tedax, que fue la primera en recibir las muestras el mismo día de los atentados y la responsable de su almacenaje. Explicó el modo en que estas pruebas han estado guardadas: en un armario, a temperatura estable y en cajas, bolsas y sobres. Precisamente para evitar cualquier tipo de contaminación. También afirmó que normalmente no se envían a la Policía Científica muestras de explosivos para su análisis. Afirmación que quedó en entredicho con un informe exhibido por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M. Bermúdez no quiso que llegara el receso sin exigirle a la perito que entregue todas las notas que realizó el día de los atentados en el juzgado
La jefa de laboratorio de los Tedax durante el 11-M ha tenido que contestar a multitud de cuestiones relacionadas con su actuación el día de la masacre. La química, a preguntas de la AVT, ha explicado que nunca guardan el agua y el acetona donde se lavaron "todas las muestras de los explosivos". Aunque ha añadido que nunca se las han pedido.
Otra de las cuestiones en controversia ha sido el lugar donde estas muestras han estado almacenadas durante años. La perito era la responsable de su almacenaje, por lo que podía contestar ampliamente. En un primer momento ha señalado que las guardó en el almacén "donde normalmente se guardan los explosivos". Es un almacén "de muestras judiciales". La perito contestó que "evidentemente" no se pueden tener miles de muestras en habitáculos o departamentos estanco y asépticos guardadas durante 15 o 20 años. Bermúdez no permitió esa explicación. "No estamos hablando de 20 años, señora". A continuación reconoció que han estado en una temperatura y humedad estables.
Es más, se metieron en un armario sólo las muestras relativas al 11-M. Éstas a su vez estaban metidas en bolsas encintadas dentro de unos sobres que a su vez se encontraban dentro de otras bolsas de plástico contenidas en una caja de cartón envuelta por una bolsa. La perito contestó además que nunca en el laboratorio de los Tedax se habían dado casos de contaminación por este sistema.
BUSCANDO COMO SEA LA CONTAMINACIÓN.
Buena parte de la sesión de tarde se caracterizó por las discusiones entre los peritos, las contradicciones de la jefa del laboratorio de los TEDAX y el empeño del fiscal Zaragoza en avalar de cualquier forma la tesis de la contaminación. Pese a que la terminología empleada por los expertos escapa al común de los mortales sí pudo intuirse que el trabajo diario de los peritos ha debido ser tenso. A cada afirmación llegaba una discrepancia. Lo que uno afirmaba el otro lo negaba. ¿Qué quedo claro? Desde luego que la fiscal no tenía un solo indicio para hacer aquella afirmación de "es goma 2 ECO y vale ya".
Hasta bien avanzada la sesión no hubo posibilidad de saber si todas las muestras remitidas a los peritos habían sido lavadas con agua y acetona (práctica disolvente necesaria en ocasiones para extraer sustancias de una muestra). De hecho, y para mayor confusión, se manejaron las dos posibilidades: Todas las muestras se lavaron con agua y acetona pero, en algunos casos, no se lavó toda la muestra. Aquí es donde se debatió fundamentalmente sobre dos muestras: la M-1 (polvo procedente del extintor que había en un vagón de la estación de El Pozo) y la 6-12-A (trozo de tela procedente de una bolsa). Aunque pueda resultar complicado, sin una sólida formación científica, seguir los argumentos de los peritos conviene reseñar algunos de los momentos en los que salió a la luz la tesis de la aparición de sustancias por mera contaminación, por cierto, no definida.
Uno de los peritos pidió la palabra para decir que en el polvo de extintor aparecieron sustancias dignas de mención. Sometida a prueba con difenilamida, mostraba un precipitado propio de los nitratos, y eso – explicó – es una potencial presencia de explosivos. Pero la jefa de laboratorio discrepó: esa no es una prueba específica de nitratos. Pueden salir "miles de cosas más". Para el perito, entre esas miles de cosas también está la presencia de explosivo: "Merecía la pena – lamentó – haber seguido esa línea de investigación".
Tras varias intervenciones de los peritos que han hecho las pruebas sobre la capacidad de absorción del polvo de extintor y si esa capacidad vale tanto para demostrar qué tipo de explosivo había como para inferir que se contaminaron, se llegó a decir que en 2004 aquella muestra no tenía componentes explosivos salvo los nitratos que pudieran ser propios del extintor. El juez Javier Gómez Bermúdez comenzó a enfadarse: ¿Es que el laboratorio está sucio, es malo, está desordenado, qué explicación tiene entonces?
A todo esto, Javier Zaragoza aprovechó cualquier oportunidad para incidir en la contaminación por peregrina que esta fuera. Llegó a preguntar ¿si la goma 2 ECO está unida a goma 2 EC podría salir DNT?
LAVADO DE MUESTRAS: SÍ PERO NO.
Uno de los peritos apuntó que cuando recibieron las muestras de los focos "todas están lavadas" con agua y acetona como, por otra parte, hicieron constar en uno de los informes preliminares. Pero el fiscal insistió en que la jefa de laboratorio ya había dicho que no todas estaban lavadas. Al final resultó que sí, que todas estaban lavadas pero no en su totalidad. Y, ¿dónde están las demás muestras?, preguntó Bermúdez. Enviadas dice la química. Un perito trató de explicar algo que volvió a servir al fiscal y que el propio Bermúdez asumió como posible punto de encuentro: esta vez, el protagonista era el sulfato amónico aparecido en las muestras 6-12-A y 6-12-C. Dicen que si se hubiera lavado con agua habría desaparecido ese compuesto. Se quería pues, demostrar que no todas fueron lavadas. Pero la clave está en que siendo eso cierto nadie quiso reparar en que en esas muestras apareció DNT, componente incompatible con la Goma 2 ECO. ¿Contaminación? Bermúdez seguía preguntando de qué forma.
Mientras Zaragoza seguía arrimando el ascua a su sardina un perito se quejó de que, digan lo que digan con el sulfato amónico, "se nos dijo por escrito y hemos solicitado entrevistas para que se nos aclarara lo del agua y acetona. No se nos han aportado las aguas de lavado y la acetona". Pero, ¿existen? Pues no.
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