ANV TIENE MAYORÍA ABSOLUTA EN 17 PUEBLOS Y SIMPLE EN OTROS 14. LA NEGOCIACIÓN CON ETA BENEFICIA ELECTORALMENTE EN EL PAÍS VASCO AL PSOE Y AL PARTIDO DE LA BANDA TERRORISTA.
PSOE y ANV, las bazas electorales de los dos grandes protagonistas del proceso de negociación entre el Gobierno y ETA, fueron los grandes beneficiados de la jornada electoral en la comunidad vasca. Los primeros aumentaron su representación política en los tres territorios, llegando a ser, incluso, la fuerza más votada en Vitoria. Los segundos recuperaron sus feudos tradicionales allí donde se les permitió concurrir. Por su parte, PP y PNV, que no han participado en la negociación, ya sea por voluntad propia – populares – o al haberse visto apartados a un segundo plano – peneuvistas – han reducido su presencia institucional.
La negociación política entre el Gobierno y la banda terrorista ETA fue el tema central de la campaña electoral vasca. Prueba de ello es que los dos partidos protagonistas, el PSOE y ANV (la marca electoral de ETA) han visto cómo han sido los partidos que mejores resultados han obtenido en las elecciones partiendo de los conseguidos hace cuatro años.
El PSOE fue sin lugar a dudas la fuerzas más emergente en las elecciones a las tres Juntas Generales, convirtiéndose en la fuerza política más votada en Guipúzcoa (aumenta 4 junteros, empatando con el PNV), en la segunda fuerza en Álava (aumenta dos junteros), y recortando distancias con el partido de Imaz e Ibarretxe en Vizcaya (gana cinco puntos porcentuales y tres junteros). En cuanto al poder local, hay que destacar que se convirtió en la fuerza más votada en Vitoria, aumentó cinco puntos porcentuales sus resultados en Bilbao y en San Sebastián aumentó su porcentaje de votos, conservando su hegemonía electoral en la ciudad.
ANV ha logrado la mayoría absoluta en un total de 17 de las 31 localidades en las que ha vencido en estas elecciones municipales, mientras que en otros 14 en los que ha sido la fuerza más votada podría gobernar en minoría o precisaría de pactos si quiere obtener la Alcaldía. En Álava, el brazo político de ETA sólo ganó en un pueblo, en Aramaio, en el que logró mayoría absoluta. En Vizcaya, venció en siete pueblos y en seis de ellos consigue gobernar en solitario (Ajangiz, Atxondo, Aulesti, Izurtza, Mallabia y Ubide), para acceder a la Alcaldía de Elorrio deberá pactar o que el resto de partidos no se unan. De los 23 de Guipúzcoa en los que fue la lista más votada, ANV ha logrado la mayoría absoluta en 10 de ellos: Aizarnazabal, Aduna, Alegia, Anoeta, Itsasondo, Legorreta, Lezo, Oiartzun, Orexa e Ikaztegieta. En grandes localidades como Pasajes o Hernani podrá gobernar previsiblemente en minoría, ya que sería necesaria una coalición que englobase a extremos tales como PP y Aralar para quitarse la alcaldía. Más difícil les resultará en Mondragón, Vergara o Urretxu, donde un acuerdo PNV-EA-IU-Aralar ya les apartaría del gobierno local.
Los grandes perjudicados han sido, sin duda, tanto PP como PNV. Los populares se han desplomado en los tres territorios históricos, aunque una bajada aún mayor del PNV les ha permitido camuflar algunos de sus resultados. Así, ese desplome del PNV en Álava les permite continuar siendo la fuerza más votada en Álava, aunque quedan como segunda fuerza en el que hasta ahora era su bastión electoral: Vitoria. Tan sólo gobernarán, a la espera de pactos, en una localidad alavesa, cuando hasta ahora lo hacían en siete. En Vizcaya y Guipúzcoa pierden dos procuradores en las Juntas Generales y ediles en numerosos pueblos. Como datos positivos, el inesperado ascenso en la localidad vizcaína de Guecho y la alcaldía de Lizartza (Guipúzcoa), al ser ilegalizada las listas de ETA que concurrían.
El PNV se desinfla en Álava y Guipúzcoa, aunque se mantiene en su tradicional feudo: Vizcaya. De ser la segunda fuerza política en Vitoria y la primera en Álava pasa al tercer puesto en ambos y pierde también un importante número de ediles en los consistorios del territorio. En Guipúzcoa, es superado como primera fuerza política por el PSOE y la ruptura de su coalición con EA le hace bajar 26 puntos porcentuales. En San Sebastián es incluso superado como segunda fuerza política de la ciudad por el PP. Tan sólo mantiene su fuerza en Vizcaya, donde tan sólo pierde tres procuradores en las Juntas Generales y Azkuna mantiene el feudo de Bilbao, aunque tenga que ser a través de pactos.
MI TOCAYO EL OPTIMISTA.-
ELECCIONES 27-M. TODO QUEDA MÁS CLARO.
Los resultados de las elecciones del 27 de mayo no dejan margen para la duda. Rodríguez Zapatero y el PSOE salen de las urnas muy tocados para las próximas generales, con Navarra como el gran examen al que deberán someterse de inmediato y con una misión cumplida: ETA-Batasuna ha vuelto a las instituciones democráticas. De todo ello, sin duda el futuro de Navarra es donde se van a tener que retratar sin matices, lo quieran o no. En la citada Comunidad Foral no hay márgenes. Pueden dejar gobernar a la Unión del Pueblo Navarro, que es la fuerza más votada, o pueden pactar con Nafarroa Bai repartirse el poder: los socialistas en el ejecutivo autonómico y los anexionistas nacionalistas en el ayuntamiento de Pamplona. Un acuerdo de ese tipo llevaría al PSN a convertirse en socio municipal de la franquicia de ETA-Batasuna, lo que supondría un desgaste muy fuerte para Zapatero y su Gobierno. Sí los socialistas niegan su apoyo a UPN, Rodríguez Zapatero quedará en la más absoluta de las evidencias. Hasta ahora ha ido cediendo a todas las exigencias de los etarras, y estos ansían la anexión de Navarra al País Vasco; el acceso de los nacionalistas al poder acercaría ese objetivo más de lo que nunca ha estado. El apoyo a un pacto con Nafarroa Bai retrataría a un presidente que ha hecho de la rendición ante el terrorismo su principal proyecto político. Y es precisamente como parte de esas cesiones, de ese pago a ETA por no matar antes de las elecciones, que Batasuna ha vuelto bajo el disfraz de Acción Nacionalista Vasca a los ayuntamientos vascos y navarros. Gracias a Zapatero han recuperado toda la fuerza que habían perdido por la aplicación implacable de la ley de partidos previa al nombramiento de Conde Pumpido como Fiscal General. La presencia de los terroristas en los consistorios es uno de los mayores logros del perverso talante del actual presidente del Gobierno. En todo caso, lo que no cabe duda es que, tras las elecciones del domingo, nos encontramos en plena carrera de las generales. Por eso tiene tanta importancia la llamativa pérdida de esa dosis de más que siempre tiene el último ganador de las elecciones. Zapatero ya ha dilapidado la ventaja con que contaba cuando llegó al Gobierno. En estos momentos, la delantera, aunque por poco, la lleva Rajoy. Por eso, y pese a que los resultados le permiten llevar a cabo sus planes en Navarra, el 27 de mayo es el principio del fin de la legislatura de Zapatero.
Ignacio Villa.
PSOE y ANV, las bazas electorales de los dos grandes protagonistas del proceso de negociación entre el Gobierno y ETA, fueron los grandes beneficiados de la jornada electoral en la comunidad vasca. Los primeros aumentaron su representación política en los tres territorios, llegando a ser, incluso, la fuerza más votada en Vitoria. Los segundos recuperaron sus feudos tradicionales allí donde se les permitió concurrir. Por su parte, PP y PNV, que no han participado en la negociación, ya sea por voluntad propia – populares – o al haberse visto apartados a un segundo plano – peneuvistas – han reducido su presencia institucional.
La negociación política entre el Gobierno y la banda terrorista ETA fue el tema central de la campaña electoral vasca. Prueba de ello es que los dos partidos protagonistas, el PSOE y ANV (la marca electoral de ETA) han visto cómo han sido los partidos que mejores resultados han obtenido en las elecciones partiendo de los conseguidos hace cuatro años.
El PSOE fue sin lugar a dudas la fuerzas más emergente en las elecciones a las tres Juntas Generales, convirtiéndose en la fuerza política más votada en Guipúzcoa (aumenta 4 junteros, empatando con el PNV), en la segunda fuerza en Álava (aumenta dos junteros), y recortando distancias con el partido de Imaz e Ibarretxe en Vizcaya (gana cinco puntos porcentuales y tres junteros). En cuanto al poder local, hay que destacar que se convirtió en la fuerza más votada en Vitoria, aumentó cinco puntos porcentuales sus resultados en Bilbao y en San Sebastián aumentó su porcentaje de votos, conservando su hegemonía electoral en la ciudad.
ANV ha logrado la mayoría absoluta en un total de 17 de las 31 localidades en las que ha vencido en estas elecciones municipales, mientras que en otros 14 en los que ha sido la fuerza más votada podría gobernar en minoría o precisaría de pactos si quiere obtener la Alcaldía. En Álava, el brazo político de ETA sólo ganó en un pueblo, en Aramaio, en el que logró mayoría absoluta. En Vizcaya, venció en siete pueblos y en seis de ellos consigue gobernar en solitario (Ajangiz, Atxondo, Aulesti, Izurtza, Mallabia y Ubide), para acceder a la Alcaldía de Elorrio deberá pactar o que el resto de partidos no se unan. De los 23 de Guipúzcoa en los que fue la lista más votada, ANV ha logrado la mayoría absoluta en 10 de ellos: Aizarnazabal, Aduna, Alegia, Anoeta, Itsasondo, Legorreta, Lezo, Oiartzun, Orexa e Ikaztegieta. En grandes localidades como Pasajes o Hernani podrá gobernar previsiblemente en minoría, ya que sería necesaria una coalición que englobase a extremos tales como PP y Aralar para quitarse la alcaldía. Más difícil les resultará en Mondragón, Vergara o Urretxu, donde un acuerdo PNV-EA-IU-Aralar ya les apartaría del gobierno local.
Los grandes perjudicados han sido, sin duda, tanto PP como PNV. Los populares se han desplomado en los tres territorios históricos, aunque una bajada aún mayor del PNV les ha permitido camuflar algunos de sus resultados. Así, ese desplome del PNV en Álava les permite continuar siendo la fuerza más votada en Álava, aunque quedan como segunda fuerza en el que hasta ahora era su bastión electoral: Vitoria. Tan sólo gobernarán, a la espera de pactos, en una localidad alavesa, cuando hasta ahora lo hacían en siete. En Vizcaya y Guipúzcoa pierden dos procuradores en las Juntas Generales y ediles en numerosos pueblos. Como datos positivos, el inesperado ascenso en la localidad vizcaína de Guecho y la alcaldía de Lizartza (Guipúzcoa), al ser ilegalizada las listas de ETA que concurrían.
El PNV se desinfla en Álava y Guipúzcoa, aunque se mantiene en su tradicional feudo: Vizcaya. De ser la segunda fuerza política en Vitoria y la primera en Álava pasa al tercer puesto en ambos y pierde también un importante número de ediles en los consistorios del territorio. En Guipúzcoa, es superado como primera fuerza política por el PSOE y la ruptura de su coalición con EA le hace bajar 26 puntos porcentuales. En San Sebastián es incluso superado como segunda fuerza política de la ciudad por el PP. Tan sólo mantiene su fuerza en Vizcaya, donde tan sólo pierde tres procuradores en las Juntas Generales y Azkuna mantiene el feudo de Bilbao, aunque tenga que ser a través de pactos.
MI TOCAYO EL OPTIMISTA.-
ELECCIONES 27-M. TODO QUEDA MÁS CLARO.
Los resultados de las elecciones del 27 de mayo no dejan margen para la duda. Rodríguez Zapatero y el PSOE salen de las urnas muy tocados para las próximas generales, con Navarra como el gran examen al que deberán someterse de inmediato y con una misión cumplida: ETA-Batasuna ha vuelto a las instituciones democráticas. De todo ello, sin duda el futuro de Navarra es donde se van a tener que retratar sin matices, lo quieran o no. En la citada Comunidad Foral no hay márgenes. Pueden dejar gobernar a la Unión del Pueblo Navarro, que es la fuerza más votada, o pueden pactar con Nafarroa Bai repartirse el poder: los socialistas en el ejecutivo autonómico y los anexionistas nacionalistas en el ayuntamiento de Pamplona. Un acuerdo de ese tipo llevaría al PSN a convertirse en socio municipal de la franquicia de ETA-Batasuna, lo que supondría un desgaste muy fuerte para Zapatero y su Gobierno. Sí los socialistas niegan su apoyo a UPN, Rodríguez Zapatero quedará en la más absoluta de las evidencias. Hasta ahora ha ido cediendo a todas las exigencias de los etarras, y estos ansían la anexión de Navarra al País Vasco; el acceso de los nacionalistas al poder acercaría ese objetivo más de lo que nunca ha estado. El apoyo a un pacto con Nafarroa Bai retrataría a un presidente que ha hecho de la rendición ante el terrorismo su principal proyecto político. Y es precisamente como parte de esas cesiones, de ese pago a ETA por no matar antes de las elecciones, que Batasuna ha vuelto bajo el disfraz de Acción Nacionalista Vasca a los ayuntamientos vascos y navarros. Gracias a Zapatero han recuperado toda la fuerza que habían perdido por la aplicación implacable de la ley de partidos previa al nombramiento de Conde Pumpido como Fiscal General. La presencia de los terroristas en los consistorios es uno de los mayores logros del perverso talante del actual presidente del Gobierno. En todo caso, lo que no cabe duda es que, tras las elecciones del domingo, nos encontramos en plena carrera de las generales. Por eso tiene tanta importancia la llamativa pérdida de esa dosis de más que siempre tiene el último ganador de las elecciones. Zapatero ya ha dilapidado la ventaja con que contaba cuando llegó al Gobierno. En estos momentos, la delantera, aunque por poco, la lleva Rajoy. Por eso, y pese a que los resultados le permiten llevar a cabo sus planes en Navarra, el 27 de mayo es el principio del fin de la legislatura de Zapatero.
Ignacio Villa.
1 comentario:
Si; cuando el comentario no sea anónimo.
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